El campeón, título que los seguidores celestes le refregaron durante casi toda la noche a sus rivales, pasaba al frente. Pero cuando ni siquiera habían terminado de celebrar, Joselito Vaca convirtió uno de los mejores goles del año: sacó un envenenado derechazo desde unos 30 metros e infló la valla de Ruth, cuya estirada acabó siendo estéril.
Blooming estaba obligado a ir al frente y buscó hacer daño con Akerman y Álvarez como abanderados. Boyero no entró en conexión (más allá de un cabezazo que Galarza le tapó bien), porque la falta de ritmo le pasó factura. Desde el medio, Gómez y Vieira empujaron, pero a ambos les faltó precisión en la última entrega.
Pesimo: Óscar Saucedo
La labor del juez fue bastante discutida. No impuso autoridad, la barrera de Oriente se adelantó cuantas veces quiso y se dejó gritar por más de un jugador. Además, Saucedo detuvo demasiado el juego. Eso sí, expulsó bien a Vieira y Aguirre por agresión mutua. Pero le faltó autoridad.Fuente: El Deber
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