Blooming cantó victoria al fin en la altura, después de mucho tiempo; jugando bien, desplegando buen fútbol, generando claras opciones de gol y, sobre todo, dando una imagen de equipo recuperado. Ayer, con un gol de Didí Torrico en la agonía del partido, derrotó a Universitario (1-0) y esta victoria, la tercera que consigue al hilo, lo encamina con buen ánimo al clásico cruceño del próximo domingo frente a Oriente, al que no le puede ganar desde hace más de tres años.
El de ayer fue un partido entretenido y de emociones cambiantes. Blooming y Universitario tuvieron a su tiempo claras opciones para abrir el marcador, pero definitivamente los delanteros de uno y otro equipo no estuvieron en su noche. Encima, los arqueros Hugo Suárez y, sobre todo, Marcelo Robledo pusieron las manos y los pies en los momentos cruciales. El de Universitario se estaba perfilando para ser considerado la figura del encuentro, por sus reiteradas intervenciones de mérito, pero por esa genialidad de Torrico en la última acción, el de Blooming se llevó todos los honores.
Tempranito nomás Blooming avisaba de lo peligroso que sería en ofensiva con un zurdazo de Almirón y que Robledo desvió al tiro de esquina estirando el pie. Como esas opciones claras hubo varias. Salinas tuvo un par (22’ y 40’), Minadevino otra (75’) pero el que no perdonó fue Torrico. Se jugaban cuatro minutos de adición, de los cinco que dio el árbitro Raúl Orosco, cuando un pelotazo al vacío de Helmut Gutiérrez encontró bien posicionado al mediocampista cochabambino y tras sacarse la marca de encima de un central, definió con altura. Robledo achicó bien su arco pero esta vez la pelota se metió besando el poste derecho del buen arquero de la U.
Universitario también tuvo sus opciones, pero su paupérrimo poder ofensivo lo llevó a sufrir su segunda derrota consecutiva (en la fecha anterior cayó de local ante Wilstermann). Alejandro Bejarano tuvo la más clara oportunidad para marcar a los 40 minutos, pero se pasó de exquisito y erró. Saucedo tuvo otra clara situación de gol (49’), de cabeza, y el español Ignacio Rodríguez (77’) también erró una oportunidad cuando parecía que se rompía el cero.
Siempre para adelante
La virtud de Blooming fue no renunciar a la victoria. El DT Mauricio Soria, aun cuando el empate parecía buen negocio, mantuvo un equipo con carácter ofensivo, con muchas llegadas y, sobre todo, generando constante peligro al arco de Robledo.
En los últimos minutos del partido Universitario se quedó con un hombre menos por la expulsión del argentino Federico Silvestre (88’). En la jugada previa Diego Cabrera cometió una dura entrada contra Miguel Ángel Mercado y producto de esa acción se produjeron empujones y agresiones verbales entre jugadores de ambos equipos. Esa tarjeta roja benefició al equipo visitante porque le facilitó el trabajo.
Hacía rato que Blooming no se olvidaba de los efectos de la altura y confiaba solo en sus posibilidades. Ayer ganó bien, suma nueve puntos en tres partidos, es único puntero del torneo Apertura de la Liga y llega en condición de invicto a un clásico que necesita ganar para reforzar su buen arranque en el campeonato y dar fin a la supremacía de los orientistas.
Fuente: El Deber
