Golpe celeste al final
Volcó un resultado que le era adverso los académicos derrotaron a los refineros por dos goles contra uno.
Con el último aliento y cuando parecía
que las fuerzas lo habían abandonado, Blooming asestó un golpe mortal a
Oriente Petrolero, al derrotarlo por dos goles contra uno, en un
infartante final del clásico 182 de la historia de la Liga y hoy
División Profesional.
Le bastaron ocho minutos al equipo
dirigido por Erwin Sánchez para dar vuelta a la historia, ante un rival
que daba la impresión se sentía seguro de llevarse los tres puntos pero,
aflojó y los celestes no perdonaron. El cotejo se jugó en el estadio
“Tahuichi” Aguilera ante algo más de 30 mil espectadores.
Cerca
del cuarto de hora, la primera gran opción desperdiciaron los celestes,
cuando se fue Britos, puso un pase al medio y Arano en forma increíble
falló.
A los 26' otra de los celestes. Tiro
libre de Joselito, alguien la peinó y en la boca del arco Coímbra que la
mandó a las nubes. De no creer.
Oriente no funcionaba y si lo hacía no
llegaba con peligro hasta el arco de Hugo Suárez. Eran los celestes que
dominaban el juego, llegaban pero no concretaban.
A los 39' otra gran opción de los
“pasacaneros del casco viejo”. Bargas que se fue, puso una pelota
notable y esta vez fue Leo Vaca que se lo perdió. Hasta ahí, Blooming
merecía largamente la diferencia a su favor pero en todas falló.
Oriente miraba y agradecía que milagrosamente se iba con el 0-0 al cabo de los 45'.
La
historia se dio vuelta ni bien comenzado el segundo tiempo porque,
apenas 15 segundos, le pusieron un balón a Freitas y tras dominar, sacó
un terrible remate pero Suárez en atajado notable evitó el gol.
Entre ese instante y los seis, los albiverdes hicieron más que en los 45 iniciales en materia ofensiva.
Hasta que llegó su premio. Ronaldo
Sánchez que se “inventó” una gran jugada, dejó a cuanto rival se puso al
frente y sacó un remate que roza en un rival, se eleva y cae detrás de
Suárez, 1-0.
Pero increíblemente bajó la presión y después lo pagó.
Pero increíblemente bajó la presión y después lo pagó.
Blooming había
perdido a sus dos delanteros, Bargas y Britos y solo le quedaba Leo
Vaca y daba la impresión que no tenía con que ir a por lo menos el
empate, pero Cristian Fernández sacó un conejo de la galera y puso un
pase al vacío, la ganó Leo y definió con tiro cruzado. Pero lo grandioso
llegó a los 93' otra vez Leo, pateó al pecho de Zamora y Joselito
culminó un obra de arte para el 2-1.
Fuente: El Día
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