Muchos hinchas de Oriente petrolero se dieron cita a la mencionada entrega, para ello la dirigencia Bloominista puso a disposición de los hinchas albiverdes 20 micros que trasladarían a los simpatizantes desde las zonas periféricas de la ciudad de Santa Cruz.
Como ya es costumbre en aniversarios y acontecimientos importantes en la vida austera del club verdolaga la celebración fue con las ya infaltables empanadas y soda que se repartieron entre los hinchas, que aprovecharon en su mayoría para saciar el hambre que tenían tras varios días sin probar bocado.
Al calor de la noche la dirigencia Albiverde tampoco quiso quedar indiferente con su hinchada y fue en un justo homenaje a ella que presentaron el nuevo escudo de su club.
Este sustituye las estrellas que tenían anteriormente por las tradicionales empanadas, de la misma manera la torre de extracción de petróleo fue sustituida tras la nacionalización llevada acabo por el gobierno nacional y en su lugar se incorporo una botella de gaseosa.
El balón de fútbol también fue sustituido por considerar que la practica del deporte no ha rendido muchos logros y en contraparte el conocimiento de los reglamentos otorgó al club un campeonato por lo que se propuso que para formar parte del club además de aptitudes para el fútbol se deberá tener mucho conocimiento sobre los reglamentos de los campeonatos pues futuras impugnaciones podrían otorgar al club reconocimientos internacionales.
Los Orientistas observaron maravillados su nuevo hogar y entre lágrimas y una que otra sonrisa tomaron posesión de la nueva sede, tanta fue la alegría que un jugador del club bailaba de emoción.
El final de la noche no fue el mejor, tras la retirada de todos los Blooministas para que el festejo prosiguiera en un ambiente familiar, un Gato que estaba presente en los alrededores de la sede, que había visto el baile de uno de los jugadores, se molesto y arremetió contra la hinchada Orientista.
La Policía Nacional también se dio cita para esclarecer los hechos, lo que provoco que la hinchada Orientista huya del lugar sin prestar declaración alguna, se presume a causa de los actos delictivos que la mayoría de los integrantes de la mencionada hinchada tienen.
El gato protagonista del mencionado suceso fue trasladado a un hospital para que se le realice un lavado de estómago, tras haber ingerido algún tipo de bacteria, y posteriormente fue puesto en libertad, una patrulla lo traslado hasta el hogar de la familia Fernandez.