Goleada de la academia
con diez hombres
Blooming
derrotó por 3-0 a Real Potosí y sumó su segundo triunfo como local. Los
goles fueron marcados por Pereyra, Bargas y Salinas.
Blooming consiguió una merecida victoria la noche del miércoles en el
Tahuichi Aguilera, en duelo por la sexta fecha del Clausura. El equipo que dirige Erwin Sánchez superó con aplomo
por 3-0 a Real Potosí y escaló al tercer lugar de la tabla al sumar
diez unidades. Gran labor la del equipo celeste, con mucho vértigo y
presión en ofensiva y teniendo en el argentino Martín Minadevino a su
hombre clave para lograr la victoria.
Comenzó la academia golpeando de entrada con un perfecto cabezazo de Federico Pereyra (9’)
que le anticipó a Henry Lapczyk tras un centro desde la izquierda. Pero
antes, el mismo Minadevino y Dustin Maldonado, habían inquietado.
En esa etapa
Blooming tuvo atosigado a su rival, no lo dejó salir con comodidad producto de la presión ejercida por Hugo Bargas, Minadevino, Pablo Salinas y Moisés Villarroel.
Los
lilas, sofocados por la presión ejercida, intentaron salir por derecha
aprovechando el coraje del lateral Saúl Torres y del veloz atacante Iván
Zerda. Pero fueron pocas las chances porque Blooming tuvo el mérito de anular a Darwin Peña
cortando cualquier circuito del juego visitante. Esa etapa acabó con un
remate de Zerda y una gran intervención de Suárez. Minadevino y
Villarroel pudieron haber aumentado.
En el complemento los de Erwin Sánchez golpearon de entrada. Un tiro de esquina de Didí Torrico encontró la cabeza de Hugo Bargas (51’), que prácticamente sin marca le cambió de palo el balón a Lapczyk originando el 2-0 parcial.
Merecido por lo que había hecho Blooming hasta ese momento. Pero había más,
Minadevino seguía siendo inquietante,
aprovechando la solidez del bloque defensivo en el que Pereyra,
Cristhian Coimbra y Mauro Marrone resultaban clave. Pero Real Potosí no
se quedó.
El técnico José Rossi envió a la cancha a Piris y con él en cancha Real Potosí creció por izquierda.
Es más, él pudo haber marcado el descuento a los 60’ con un zapatazo
que devolvió el parante ante la mirada atónita de los hinchas. Fue un
momento difícil para Blooming que se alargó luego de que Gilbert Álvarez
también inquietara tras centro de Alaca. El partido crecía en emociones
y el público lo disfrutaba.
Cuando el partido ingresó en la
recta final y ya con Almirón y Gutiérrez en cancha, la academia
aprovechó para liquidarlo. El volante desbordó por derecha dio el centro
y encontró a Salinas sin marca para empujar el balón a las redes (87’).
Era el 3-0 y el de la tranquilidad para un equipo que jugó bien, que
mereció ganar y que ahora disfruta de haberse reencontrado con el
triunfo.
Fuente: El Deber